Vamos a seguir creyendo y luchando por un país más justo, más equitativo. Fortalecer nuestras democracias es la tarea, y nada es posible desde la crueldad - "la crueldad está de moda en la Argentina. Luce bien, cae bien" (Martin Kohan en Futurock), ni la de militares y genocidas, ni la de una política represiva contra el pueblo. Las banderas de memoria, verdad y justicia nunca se asociaron a la crueldad, porque la lucha la dimos en las calles, en las salas de audiencia de los juicios, celebrando la noticia de un nieto, nieta encontrada, levantando los pañuelos, los blancos, los verdes. No olvidamos ni perdonamos. Vienen tiempos muy difíciles, pero entiendo, ninguna derrota es definitiva y cuando no encontremos las respuestas, ni el aliento: nos refugiaremos en las luchas colectivas, en los abrazos y canciones de cada 24 de marzo.