El actual escenario de crisis climática generó la necesidad de que los estados de Colombia y Chile, con el apoyo de CEJIL formularán una Solicitud de Opinión Consultiva (1), ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos sobre “Emergencia Climática y Derechos Humanos”(2). En general, las Opiniones Consultivas, son explicaciones de la Corte sobre la interpretación más adecuada de la letra de un tratado. En particular, en esta solicitud el pedido es se expida sobre, el alcance de las obligaciones estatales, tanto en su faz individual como colectiva, para responder a la emergencia climática, teniendo especialmente en cuenta las afectaciones diferenciadas sobre las diversas regiones, los grupos en condiciones de vulnerabilidad, la naturaleza en su conjunto y la sobrevivencia humana en este planeta. 

Tanto Colombia como Chile, son países que han sufrido catástrofes naturales como consecuencia del cambio climático. Y la pregunta que nos hacemos es cómo ese cambio climático afecta a nuestro país y al norte argentino en particular.

Por un lado, la emergencia climática es un hecho. El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) creado por la Organización Meteorológica Mundial (OMM) y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) para proporcionar una fuente objetiva de información científica sobre el cambio climático remarcan que, el cambio climático es real y las actividades humanas son la causa principal, la concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera está directamente relacionada con la temperatura global promedio en la Tierra (3).  

Más allá de que expertos den cuenta de que el cambio climático es un hecho, quienes habitamos esta geografía sufrimos de manera directa los efectos. En el caso de nuestro país, al igual que otros países del mundo, como consecuencias podemos nombrar la sequía del 2022, producto de la merma de precipitaciones, y el fenómeno de la niña, si bien no hay una atribución directa, podemos presumir que la pérdida de los pulmones verdes que también regulan la humedad en el ambiente son una causa indirecta de este escenario. 

A su vez esto se relaciona con la tala y deforestación en diferentes zonas del Gran Chaco y el NEA. Estas sequías a su turno generan una cantidad importante de incendios forestales, para el 2022 el Reporte mensual de alerta temprana registró un total de 561164,89 hectáreas incendiadas en el país (4).  

El último fin de semana un temporal azotó a la provincia de Buenos Aires, dejando como saldo 13 personas muertas en la ciudad de Bahía Blanca. En el AMBA se identificó la caída de más de 300 árboles e innumerables daños materiales. Al mismo tiempo un apagón dejó sin luz a todo el NOA, las provincias de Santiago del Estero, Tucumán, Jujuy, Salta y Catamarca se vieron afectadas por esta situación, en medio de una ola de calor, donde las temperaturas rondaban los 40°. De acuerdo a datos del SMN desde el año 2015 se registran las más altas temperaturas desde 1961. El 2023 cierra con un saldo de olas de calor intensas, incendios forestales, sequías. 

Frente a esto el gobierno recientemente asumido, decide degradar el ministerio al rango de subsecretaría, lo cual implica un retroceso en materia de agenda ambiental. 

Ante este escenario la pregunta que nos hacemos es ¿cómo se logra una transición energética en clave interseccional, intergeneracional e intercultural?

Argentina no sólo enfrenta el desafío de abandonar los combustibles fósiles, como la mayoría de los países del Sur Global, quienes heredamos una deuda climática de los países del norte global. Sino que también se encuentra en el centro de la disputa global junto a Chile y Bolivia, por el tan codiciado litio, por ser depositarios de aproximadamente el 50% de las reservas mundiales. La presencia de este mineral coloca al triángulo del litio -como se denomina a la zona geográfica que concentra reservas de litio- como un escenario de disputa geopolítica, donde las grandes economías como China y EEUU han puesto sus ojos, sumando a estas las grandes automotrices y grupos económicos ligados a estas.  

La Reforma Constitucional de Jujuy y el proceso de represión y criminalización que se desplegó y se despliega a través del sistema penal y contravencional dan cuenta de los intereses económicos que están en juego. Intereses que logran, como sostienen las comunidades que llevan adelante este reclamo, a través de “institucionalizar y constitucionalizar el saqueo y el extractivismo”. 

Esta reforma se llevó adelante a espaldas del pueblo jujeño, sin participación de muchos de los sectores implicados, sin consulta libre, previa e informada a las comunidades indígenas que se ven afectadas particularmente por lo contenido en el capítulo 5: nuevas declaraciones, derechos, deberes y garantías constitucionales, el cual se ocupa de todo lo referido al cambio climático, el dominio originarios de los recursos y las energías renovables. 

Desde Andhes presentamos un amicus curiae ante la Corte Interamericana en el marco del pedido de opinión consultiva sobre “Emergencia Climática y Derechos Humanos”. Se trata de un planteo escrito, manifestando estos puntos que nos preocupan y en los cuales acompañamos a las comunidades indígenas, ya que el costo del consenso de descarbonización y de la transición a energías renovables de los países con mayores niveles de consumo y con procesos productivos que han puesto al planeta en riesgo de colapso, lo estamos pagando quienes menos hemos contribuido a este escenario convirtiéndonos en zonas de sacrificio. 

(1) La opinión consultiva, es un medio por el cual la Corte IDH responde consultas que formulan los Estados miembros de la OEA o los órganos de la misma acerca de: a) la compatibilidad de las normas internas con la Convención; y b) la interpretación de la Convención o de otros tratados concernientes a la protección de los derechos humanos en los Estados Americanos.

(2) https://www.corteidh.or.cr/docs/opiniones/soc_1_2023_es.pdf

(3) También sostiene que desde la época de la Revolución Industrial, la concentración ha aumentado constantemente y, con ella, las temperaturas globales medias; el dióxido de carbono (CO2), que representa alrededor de dos tercios de los gases de efecto invernadero, es en gran medida producto de la quema de combustibles fósiles; el metano, componente principal del gas natural, es responsable de más de 25% del calentamiento que estamos experimentando hoy, es un contaminante poderoso con un potencial de calentamiento global 80 veces mayor que el CO2 en los 20 años posteriores a su liberación a la atmósfera.

(4) https://www.argentina.gob.ar/ambiente/fuego/alertatemprana/reportemensual